Cualquier empresa, especialmente las pymes, se enfrentan al enorme reto de conseguir el capital necesario para poder realizar un proyecto, iniciar operaciones, lanzar un nuevo producto, expandir el negocio o afianzar su crecimiento y posición en el mercado.
A la hora de buscar dinero existen diferentes alternativas de financiación, desde las más tradicionales hasta las más novedosas.
Aquí un resumen de las principales alternativas:
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- Leasing, renting y factoring
- Recursos propios.
- Préstamo o crédito bancario.
- Financiación colectiva o masiva (crowdfunding, crowdlending y crowdsourcing).
- Ampliación de capital (buscar socios).
- Business Angels (un inversor que apuesta por la empresa y aporta capital y conocimientos).
- Empresas de capital de riesgo o venture capital.
- Subvenciones y ayudas.
- Concursos y premios.
- Emisión de deuda (bonos).
- Sociedades de garantía recíproca (SGR)
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Del primer rubro hablaremos en este artículo.
Leasing, renting y factoring
Más allá de considerarse como formas clásicas de financiación, se trata de fórmulas financieras que te permiten mejorar el circulante, evitar grandes gastos y en general mejorar la situación económica de tu empresa.
¿Cómo funcionan?
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Leasing: es un contrato de arrendamiento puro con opción de compra. Se establece un contrato por un periodo determinado para el disfrute del bien y al término se puede optar por comprarlo, renovar el contrato de arrendamiento o devolverlo. ¿Te interesa saber qué bienes se pueden arrendar?
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Renting: es similar al leasing, ya que también es un arrendamiento, pero sin la opción de compra. Además, todos los servicios relacionados con el uso del bien se incluyen en la cuota de arrendamiento.
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Factoring: es un contrato a través del cual el empresario transmite los créditos comerciales a un tercero -generalmente una entidad de crédito-, para que se encargue de gestionarlos, financiarlos, garantizarlos y hacer con ellos lo que considere oportuno. El colateral es una factura.
En Inventa Leasing te ofrecemos mucho más que una alternativa financiera para tu negocio. Queremos ser tu aliado en la toma de decisiones, elaborando juntos una estrategia integral para la gestión y renovación de tus activos a través del arrendamiento puro porque sabemos que esto generará un impacto positivo directo en la productividad, liquidez y solidez financiera de tu empresa.
Aunque puedes leer más de este tema en otras entradas de nuestro blog, aquí te dejamos un resumen de las ventajas del arrendamiento puro:
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- Se puede financiar el 100% de la inversión.
- Las operaciones no forman parte del riesgo comercial financiero a efectos bancarios porque no se compra el bien.
- Permite obtener importantes ventajas fiscales, ya que las rentas de la maquinaria, vehículos o equipo pueden deducirse como gasto.
- Gran flexibilidad y rapidez para obtener bienes más actualizados tecnológicamente.
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Un entorno cambiante demanda opciones dinámicas, flexibles y competitivas para financiar las operaciones de tu empresa. Tenemos una solución para respaldarte.
