Tanto el leasing como el renting son instrumentos financieros que te dan la posibilidad de acceder a un bien necesario para tu empresa o actividad empresarial sin necesidad de desembolsar grandes cantidades de dinero de golpe y descapitalizarte. En ambos tienes que pagar una cuota fija al mes, cuyo monto estará fijado en el contrato.
Sin embargo sí hay algunas diferencias entre ambos esquemas, mismas que detallamos en el siguiente cuadro:
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LEASING |
RENTING |
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Es una forma de financiamiento. |
¿QUÉ ES? |
Es un sistema de arrendamiento operativo. |
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BAJA |
CUOTA MENSUAL |
ALTA |
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Tienes la posibilidad de adquirir el bien al finalizar el contrato pagando el valor residual que se haya pactado. |
TIPO DE ALQUILER |
No puedes acceder a la propiedad del bien al finalizar el contrato. |
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El titular del bien te delega todas las obligaciones de la propiedad. |
GASTOS |
En las cuotas se incluyen conceptos como: trámites, seguros, mantenimiento e impuestos. |
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Máximo 2 años |
TIEMPO DE DISFRUTE |
Máximo 5 años |
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OPCIONES AL TÉRMINO DEL CONTRATO |
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Las operaciones se realizan a través de entidades financieras acreditadas y reguladas por la ley. |
QUIÉNES OTORGAN EL SERVICIO |
El contrato se puede firmar con una empresa privada bajo la modalidad de cualquier operación mercantil. |
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Puedes deducir fiscalmente las amortizaciones y los pagos de las cuotas bajo el concepto de intereses de deuda. |
VENTAJAS FISCALES |
Solo puedes deducir las cuotas del arrendamiento. |
Como ves, cada opción tiene sus pros y sus contras, así que antes de tomar una decisión busca la asesoría de un experto de Inventa Leasing, quien analizará la situación y necesidades de tu empresa.
